Por Tracey W. Tsang, Michael Kohn, Chin Moi Chow y M Fiatarone Singh
Resumen
El propósito del estudio fue investigar si las artes marciales chinas (Kung Fu, KF) podrían ser efectivas para mejorar la composición corporal, además de ser una forma atractiva de actividad física para adolescentes inexpertos, sedentarios, con sobrepeso/obesidad. Veinte sujetos (edad: 13,3 ± 1,8 años; percentil de IMC: 98,6 (86,5 – 99,8); 60 % niñas) se asignaron aleatoriamente al grupo de control supervisado KF o placebo (Tai Chi, TC) 3 días a la semana durante 6 meses. Evaluamos la composición corporal, incluida la masa grasa y magra total y regional, la densidad mineral ósea (DMO) total y regional, el porcentaje de masa magra y grasa, el índice de masa corporal y la circunferencia de la cintura, al inicio del estudio y después de 6 meses de entrenamiento utilizando antropometría y dual- Absorciometría de rayos X de energía (DXA). La actividad física habitual y la ingesta dietética se registraron como covariables mediante autoinforme en cada punto temporal.
Como era de esperar, debido al crecimiento natural, se observaron aumentos significativos en la altura, el peso, la DMO total y lumbar y la masa magra en la cohorte a lo largo del tiempo, con una tendencia a aumentar la masa grasa corporal total, sin diferencias entre los grupos.
Por el contrario, el porcentaje de grasa y la masa grasa de Android a través de DXA no aumentaron en ninguno de los grupos con el tiempo. La ausencia de un aumento esperado similar en la adiposidad central durante 6 meses podría indicar un efecto positivo de la participación en ambos programas sobre la adiposidad abdominal metabólicamente crítica en esta cohorte.
Se justifica más investigación en esta área para determinar formas de aumentar la aceptación y el cumplimiento, y para ver si el entrenamiento de artes marciales a largo plazo no solo mantiene, sino que mejora la masa de grasa abdominal y los índices de salud metabólica relacionados en adolescentes con sobrepeso/obesidad.
Resultados
Hasta donde sabemos, este fue el primer ensayo clínico aleatorizado y controlado con placebo de Kung Fu para resultados relacionados con la salud que se llevó a cabo en cualquier cohorte. Se realizó en un entorno hospitalario, examinando adolescentes con sobrepeso y obesos de la comunidad general, todos los cuales tenían una o más anomalías metabólicas que los colocaban en riesgo de futuras enfermedades cardiovasculares ya presentes en el momento de la inscripción. La atenuación de las ganancias esperadas en todo el cuerpo y la adiposidad abdominal se observó en los controles KF y TC durante seis meses.
Se requerirán estudios más amplios y a más largo plazo para determinar si la prevención del aumento de tejido adiposo regional y de todo el cuerpo que observamos en este ensayo es un hallazgo constante, se puede mantener o aumentar a largo plazo, y si los beneficios metabólicos se acumulan a partir de estos cambios en la composición corporal.
Fuente: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3737795/