Por Sbn Yuri Lópezgallo
Uno de los movimientos menos entendidos dentro de la técnica básica del Taekwondo es el jalón de la mano o 손잡이 Sonjabi o en japonés 引き手 Hikite:
손: Son “mano”
잡이: Jabi “Capturar, agarrar”
En el Taekwondo, este movimiento ha sido interpretado únicamente como un “generador de potencia” bajo el principio de la tercera ley de Newton (a cada acción le corresponde una reacción de la misma magnitud, pero en sentido contrario) o incluso se ha llevado al absurdo de hablar de una “mano pasiva”.
Nada más lejos de la realidad.
El jalón de la mano es una acción defensiva/ofensiva, se trata de sujetar al adversario mientras ejecutamos una técnica.
Es importante recordar que el sentido del Tode, el Karate y por ende el Taekwondo es la defensa personal, la cual como es natural tiene muchas diferencias con el combate deportivo.
Una de las diferencias más importantes es la distancia del Combate, mientras que en el deporte de combate existen un gran número de situaciones donde los competidores serán separados o colocados a una distancia donde no puedan tocarse. Esto lo vemos al inicio de la contienda o cuando el referee reinicia una contienda por cualquier circunstancia.
El combate dentro de la defensa personal nace de la premisa de que es imposible evitar la confrontación al huir, esto se da cuando la distancia del atacante y del defensor es tan corta que ambos pueden tocarse. Es por ello que, a diferencia del combate deportivo, el arte de la defensa está basado en una contienda “sucia” donde el defensor buscará controlar o desestabilizar al atacante por medio de la máxima aplicación de potencia en las técnicas.
Es precisamente del concepto del control del agresor donde se nace la utilización del Hikite o jalón de la mano.
De acuerdo con Funakoshi Gichin, Padre del Karate Do:
“El sentido del Hikite (jalón de la mano) es el de sujetar el brazo del enemigo, con el objetivo de romper su postura por medio de girar y jalar el brazo que lo sujeta lo más fuerte posible”.
Sin embargo, el uso del jalón de la mano al ejecutar una técnica vas más lejos de solo el sentido práctico:
Las tres funciones principales del jalón de la mano son:
1. Controlar al atacante
2. Desestabilizar al atacante
3. Generar potencia y balance en las técnicas.
Es muy importante destacar que en una contienda no existe una mano pasiva, ambas manos realizaran movimientos de acción-reacción/compensación durante la ejecución de todas las técnicas.
Esto es muy evidente cuando observamos registros fotográficos de los maestros del pasado (como el que acompaña este post) en ellos observaremos que siempre hay una utilización de las dos manos: una controla la otra ejecuta una técnica.
¿Cómo se llego entonces a la falsa idea la “mano pasiva”?
Esto se debe a que cuando el Karate se vuelve masivo y su paradigma cambia de ser un arte puro y duro de defensa personal a ser una herramienta de perfeccionamiento del ser, su enseñanza cambio, de ser un arte enseñado de manera clandestina y en pequeños grupos secretos se pasó a una práctica pública masiva, donde los grupos eran enormes.
Se piensa que esta fue la principal razón para que los maestros comenzaran a exagerar los movimientos al mostrarlos en clase y se enfocaron en el inicio y final de las técnicas: fue así como los maestros comenzaron a exagerar la técnica: el jalón de la mano se comenzó a llevar hasta la cadera, y las posiciones comenzaron a ampliarse, todo esto con el objeto de lograr que la gran cantidad de alumnos en cada grupo pudiera apreciar la mecánica del movimiento.
Al llegar a Japón, la naturaleza tan estricta y de búsqueda de perfección del pueblo japonés, acrecentó la búsqueda del desarrollo técnico de los movimientos. Esta búsqueda permanente del pueblo japonés de buscar la perfección, generó que la mecánica se volviera más importante que la razón del movimiento. Lo anterior generó otro cambio importante en la conceptualización del arte marcial:
La separación de las técnicas en “defensas y ataques”
Este es un concepto que no existía anteriormente, ya que, en Japón, se comenzó separar a las técnicas en movimientos de defensa y movimientos de ataque, algo que originalmente no sucedía en Okinawa, tal y como podemos verlo en las palabras del Gran Sensei
Anko Itosu:
“Hay muchos movimientos en el arte marcial, cuando entrenas debes intentar entender el objetivo del movimiento y su aplicación. Tienes que tener en cuenta todos los posibles significados y aplicaciones del movimiento. Cada movimiento puede tener muchas aplicaciones”.
Este fue el contexto en que se generaron los grandes cambios, ya no solo en el objetivo de la práctica marcial, sino el entendimiento de la naturaleza de una gran cantidad de técnicas.
Es importante recordar que grandes maestros como Sensei Funakoshi y Sensei Mabuni Kenwa (fundador del Shito Ryu), afirmaban que era muy importante exagerar los movimientos al enseñarlos a los alumnos principiantes con el fin de que adquirieran las bases correctas del movimiento, y que poco a poco con el avance en el arte marcial, las posiciones y movimientos como el jalón de la mano, poco a poco se debían volver más naturales y menos exagerados.
Fue así que en el entendimiento del jalón de la mano poco a poco se fue perdiendo.
Con la llegada del arte de la mano a Corea, la evolución del arte marcial coreano y la idea de alejar a al arte del combate del Taekwondo de su origen en el Karate, se utilizó a la ciencia como la única razón de algunos movimientos, fue así como se comenzó a explicar el movimiento de la mano “pasiva” como un simple “generador de poder”, basándose en la ya mencionada “Tercera Ley de Newton”.
Sin embargo, esta teoría, si bien importante, no justifica el llevar el brazo tan atrás y convertirlo en un elemento pasivo, ya que, si bien su papel en el balance, equilibrio y generación de potencia es innegable, en la práctica queda demostrado que no es necesario llevar la mano tan atrás, lo cual es evidente al observar las técnicas de puño del boxeo, donde el puño de atrás realiza un movimiento de compensación y generación de potencia, pero se mantiene activo en el combate como un mecanismo de defensa cubriendo el rostro y el torso del competidor.
Con el desarrollo del deporte del combate y el poco o nulo entendimiento o interés de una gran cantidad de maestros por compartir este tipo de conceptos a los alumnos, generó una enorme separación entre el trabajo de los básicos, las formas y el combate. Lo que originó una falsa idea de que los básicos y las formas NO están relacionadas de con la defensa… Nada más lejos de la realidad. Es por ello que es muy importante el comenzar a trabajar de manera consciente con los alumnos sobre este tipo de detalles en el arte marcial.
Este es el camino que llevó al jalón de la mano a través de la historia a convertirse en uno de los elementos más criticados de la técnica básica del Karate y del Taekwondo, algo que ante los expertos es además de incorrecto, injustificado.
Sbn Yuri Lópezgallo
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