Por Anthony L. Komaroff, MD, Editor in Chief, Harvard Health Letter
Intentar alcanzar objetivos de actividad física puede resultar confuso: ¿debería dedicar una determinada cantidad de tiempo a hacer ejercicio o una determinada cantidad de pasos?
Un estudio de Harvard sugiere que ambos métodos de medición son igualmente eficaces para controlar si se realiza suficiente actividad para reducir el riesgo de enfermedades y aumentar la longevidad.
Los investigadores analizaron la información sanitaria de más de 14.000 mujeres sanas (de 62 años o más) que utilizaron rastreadores de actividad durante una semana y que luego fueron seguidas durante nueve años.
Independientemente del tipo de ejercicio que realizaran, las mujeres más activas tuvieron las mayores reducciones en el riesgo de enfermedad cardiovascular y muerte prematura (30 % o más), en comparación con las mujeres menos activas.
Y tanto las mediciones de minutos como las de pasos tenían las mismas asociaciones con esos beneficios para la salud. La investigación se publicó en línea el 20 de mayo de 2024 en JAMA Internal Medicine.
Dado que actualmente muchas personas utilizan dispositivos de seguimiento de actividad, los autores afirman que es hora de añadir el recuento de pasos a las recomendaciones federales sobre actividad física, que actualmente exigen 150 minutos semanales de actividad de intensidad moderada o 75 minutos semanales de actividad de intensidad vigorosa. El equivalente en pasos sería de unos 7.000 al día.